Cascadas en Andorra

Llega la primavera y, con ella, la naturaleza reaparece en todo su esplendor. Los valles amanecen llenos de flores y colores, la hierba crece fuerte y frondosa, y el agua brota de las cascadas y fluye por los ríos con más gracia que nunca. Todo un espectáculo que merece la pena vivir de primera mano. Y precisamente Andorra, un país situado en medio de la cordillera de los Pirineos y que actúa de puente entre Francia y España, es el lugar ideal para disfrutar de la naturaleza en esta época del año, por ello Andorra es considerado un paraíso de naturaleza. 

Su relieve geográfico tiene unas características muy específicas que dan pie a unas espectaculares cascadas que no te puedes perder si vienes a visitar este país. Andorra es una región de escarpadas montañas y de valles estrechos, a través de los cuales encontramos impresionantes cascadas y numerosos ríos que dan pie a más de 60 lagos repartidos a lo largo y ancho de este territorio. Los lagos más famosos son el Juclar, que tiene el honor de ser el de mayores dimensiones de toda Andorra -21 hectáreas en total-, el lago de Illa -de 13 hectáreas- y los tres lagos de Tristania. Si te apetece saber más sobre qué rutas de senderismo puedes hacer en Andorra para descubrir esos y otros impresionantes lagos de alta montaña, lee nuestro artículo sobre los mejores lagos de Andorra. 

Ahora que sabes un poco más sobre el relieve y la hidrografía de Andorra, no te puede quedar ninguna duda del potencial paisajístico que esta región alberga. Por esta razón, y más aún ahora que se acerca el calor y el buen tiempo, te traigo un post con las mejores cascadas que podrás ver y disfrutar en Andorra en verano. ¡No te pierdas ninguna! 

Mejores cascadas en Andorra 

Aquí encontrarás el listado de las cascadas más famosas de Andorra:

Cascada de Les Moles 

En la parroquia de El Canillo, la más extensa de todo el principado andorrano (más de 120 kilómetros cuadrados con diversos núcleos poblacionales con capital en Canillo), se encuentra la que probablemente es la cascada más famosa y representativa de Andorra, la cascada de Les Moltes. Concretamente, la ruta que te llevará a esta cascada, tiene su punto de inicio a pie de la carretera General 2 de Andorra (CG2) en dirección a Soldeu. 

La cascada en cuestión está a 1150 metros de altura, y mide 35 metros de largo. El espacio está muy bien habilitado para los excursionistas y visitantes, ya que goza de un tramo dedicado a una zona con mesas de picnic y una plataforma desde la que podrás observar el espectacular salto de agua de 35 metros, desde la parte más alta. 

Si nos remontamos a su historia, debes saber que esta cascada se originó en la época de la última glaciación. Formaba parte del Valle Glaciar principal, que estaba formado por la llamada Valira de Oriente, la cual tiende a erosionar más rápidamente los valles, provocando que, al derretirse los glaciares, quedase en suspensión unos metros por encima del valle principal. 

Pero, volviendo a nuestra época actual, si eres de los que se atreven con todo y tienes ganas de aventura, te recomiendo que pruebes de descender esta escalada, siempre y cuando cuentes con la ayuda de un experto y con el material técnico adecuado para descender barrancos y gargantas. La experiencia vale mucho la pena, y si lo realizas en verano, aún más. En esta línea, recuerda que la cascada de les Moles tiene agua durante prácticamente todo el año, excepto durante los dos meses de invierno, época en la que las temperaturas pueden bajar tanto que el agua se llega a helar. 

A modo de resumen, se trata de la cascada de más fácil acceso de toda Andorra, ya que, tal y como hemos dicho, se encuentra justo al lado de la carretera CG2, con un parking habilitado y asfaltado en el qué podrás aparcar el coche sin ningún problema. 

Mirador del Toll Bullidor 

En este caso, no nos vamos muy lejos de la Cascada de les Moles. Y es que, de nuevo, nos situamos en la parroquia de El Canillo. Esta vez, pero, te presento una ruta senderista a través de un sencillo camino que te llevará hasta el salto de agua del Toll Bullidor. La distancia total de esta ruta es de 860 metros, con 70 metros de desnivel, y de una dificultad clasificada como “fácil”. 

El itinerario empieza en el puente de las Molleres, a escasos metros de la rotonda de Meritxell, en dirección a Canillo. Desde aquí, nace el camino señalizado que te llevará al Toll Bullidor. Después de un rato caminando, llegarás a un primer mirador desde el que podrás observar las vistas del pueblo Mertixell, así como el santuario que lleva su mismo nombre. Siempre de forma paralela al río, debes ir siguiendo el camino hasta llegar al siguiente mirador, esta vez ya con vistas a tu objetivo: el salto de agua del Toll Bullidor. El espectáculo que tendrás delante de tus ojos no tiene precio alguno, y la ruta senderista habrá pagado la pena con creces. 

Vall del Madriu-Perafita-Claror 

Declarado por la UNESCO Bien de Patrimonio Mundial, la Vall del Madriu-Perafita-Claror se extiende por las parroquias de Escaldes, Engordany, Encamp i Sant Julià de Lòria. Se trata de la cuenca fluvial secundaria más importante del país, con sus 12 kilómetros de punta a punta, y con un desnivel de 1855 metros. Su punto más alto es el Pico de la Portelleta (situado a 2.905 metros de altitud). 

Gracias a su diversidad geográfica e hidrográfica, encontrarás distintas rutas senderistas con refugios de alta montaña que te permitirán descubrir la variedad de flora y fauna que albergan estas montañas andorranas. 

Una ruta interesante que puedes emprender en esta zona es el Circuito de les Fonts, a Engolasters, que tiene una distancia de 6 kilómetros y un desnivel de 272 metros. Es un lugar divertido y asequible al que ir con toda la familia, ya que el nivel de dificultad de la ruta es fácil. Además, no se tarda demasiado tiempo en hacerlo: 1 hora y 55 minutos en total. 

Este camino se creó, juntamente con el canal, durante los años 40, con el objetivo de alimentar el lago de Engolasters. Partiendo de la font de Corralets, el canal pasa a través de un túnel hasta llegar a Ramió, en la Valle del Madriu. Por lo que respecta al punto de inicio del recorrido, debes situarte a la carretera CS-200 en dirección a Engolasters, pasando por la capilla de Sant Miquel d’Engolasters. Poco tiempo después de haber superado los 6 kilómetros, en una curva que hace la carretera, encontramos un aparcamiento con una pequeña casita de madera a la derecha (que actúa como punto de información durante los turísticos meses de verano). Es en este punto donde se da por empezado el inicio del recorrido. 

Si quieres conocer más información al respecto, puedes encontrar en la página web oficial de Andorra un mapa del sitio así como un menú desplegable en el que encontrarás sugerencias de rutas o actividades que puedes realizar por la zona. 

Cascadas el Serrat

Cuando hablamos de Serrat, hablamos del pueblo más elevado del valle de Ordino (concretamente, se encuentra a 1500 metros de altitud), en Andorra. Este actúa como puerta de entrada a la alta montaña, y es precisamente por este motivo que desde aquí podrás iniciar múltiples rutas senderistas para conocer las cascadas de el Serrat, así como el valle de Sorteny, los Lagos de Tristaina o la estación y pista de esquí de Vallnord. 

El Serrat se encuentra justo a las puertas del Parque Natural del Valle de Sorteny, cerca de la zona de Vallnord-Arcalís. Por este motivo, podrás vivir la naturaleza en estado puro si decides visitar esta zona de Andorra. Tienes la opción de practicar diferentes deportes de montaña, así como realizar excursiones a los refugios de Rialb, Coma Obaga, o Sorteny. También puedes planear la ascensión a los picos de Pont Blanco y al de Serrena, entre muchas otras opciones. 

Cascada del río Juclar 

Esta opción es una ruta relativamente poco conocida de los Pirineos, pero que, sin embargo, vale mucho la pena y te hará disfrutar en grande de la preciosa naturaleza andorrana. Hablo de la ruta que sube hasta los lagos de Juclà desde el Pont de la Baldosa, situada al final de la Vall d’Incles. A través de esta ruta senderista, podrás ver la cascada que forma el río Juclar. Pero vayamos por partes. 

Lo mejor para iniciar la ruta una vez haya llegado al Pont de la Baladosa, es aparcar en un pequeño parking que hay justo allí. En todo momento, recuerda orientarte gracias a las señales que verás en la montaña, que te llevarán dirección al Refugio de Juclar. 

Irás avanzando a través de los prados llenos de vacas, con el río Juclar avanzando también a tu lado. Ya a la altura de los 1930 metros, llegarás a un puente, pero no hace falta cruzar, ya que puedes seguir por donde vas porque el camino es más cómodo. 

En poco tiempo, la cosa se pondrá seria: encontrarás las primeras cascadas que forman el río, hasta llegar a un puente de madera, situado a 2.130 metros de altitud. Ahora sí que tocará cruzar hacia el otro lado del río. Después de estar subiendo un buen rato, mientras vas descubriendo nuevas cascadas preciosas, llegarás a una zona con menos pendiente, ubicada entre bloques inmensos de granito, que te llevará hasta el Mirador de la Pleta a 2.240 metros de altura. 

A partir de este punto, la senda -que está marcada en color amarillo- se uno a otro sendero marcado como uno GR -con mascas blancas y rojas-. Las deberás seguir para poder llegar hasta la presa del Lago de Juclar, a 2.299 metros, y un poco más arriba, su refugio. Una vez aquí, podrás recorrer el primer y el segundo lago y disfrutar de la inmensa belleza de este lugar. Ahora, ya toca volver atrás, volviendo por el camino a través del que hemos subido. 

Cuando llegues a una casa en ruinas, puedes optar por tomar el sendero marcado de rojo y blanco, en lugar de seguir bajando por el río, y así varías un poco el recorrido y se hace más ameno el paisaje. Tocará, eso sí, pasar por unos resbaladizos bloques de granito antes de llegar al primer cuello (de 2.350 metros). El sendero pasa al lado de un lago, y remonta hasta llegar a otro cuello (2375 metros), que podríamos decir que es el punto más alto de esta ruta senderista. Las vistas panorámicas que tendrás desde aquí, no tienen desperdicio alguno. 

Siempre siguiendo las marcas rojas y blancas, irás haciendo el descenso hacia el parking donde estará aparcado tu coche, poco a poco. Hay algún punto complicado, en el que tendrás que enfrentarte a un desnivel de 200 metros por un terreno fangoso, hasta llegar a un punto de madera que atraviesa el río Manegor. Desde allí, a través de una senda que transcurre de forma paralela al río, seguirás el camino de bajada, hasta llegar de nuevo al punto de partida de esta ruta. 

Ya lo sabes, en Andorra encontrarás múltiples opciones de cascadas para visitar en Andorra, todas ellas preciosas, y cada una con su encanto y magia particulares. Y, aprovechando que vas a pasar algunos días por esta región de montaña, debes acudir, como mínimo, a alguna de las bordas más famosas de Andorra características de este país. Si te preguntas qué son las bordas, debes saber que son lugares de comida familiares, con productos kilómetro 0. Muchas de ellas datan del siglo XVI, y eran casas de campo que se usaban para almacenar tanto aperos de labranza y para guardar animales. Sin embargo, con el paso de los años, estos lugares se refundaron y se transformaron en lo que son actualmente: restaurantes donde se sirve comida tradicional andorrana.

Así que, si quieres aprovechar tu visita a Andorra y a sus maravillosas cascadas, aprovecha para completar tu día acudiendo a alguna de estas bordas tradicionales. ¡Así sí que vivirás al 100% la experiencia andorrana! ¡Te vas a enamorar del país y vas a querer venir a vivir a Andorra!

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