Desfiladero de los Arrudos

El Desfiladero de los Arrudos es una de las rutas más impresionantes y coloridas que se encuentran en el Principado de Asturias. Este desfiladero es un gran cañón fluvial -que sigue el paso del arroyo de los Arrudos- donde, por supuesto, el agua es la mayor protagonista. Esta ha dado lugar a la aparición de valles abiertos e increíbles desfiladeros de roca caliza (también conocida como roca calcárea). 

Todo este precioso entorno natural se enmarca dentro del Parque Natural de Redes, que abarca los términos municipales de Caso y Sobrescobio. Fue declarado Parque Natural en 1996, y reconocido por la UNESCO como Reserva de la Biosfera en 2001.

En los casi 400 km²  de extensión que ocupa, la principal característica del Parque de Redes es que cuenta con una superficie arbolada que se extiende en más del 40% del territorio. Por esta razón, la frondosidad de los bosques atlánticos del Desfiladero de Asturias es conocida en toda la península y lo convierte en un destino obligatorio para los amantes de la naturaleza. 

Concretamente, la ruta del Desfiladero de los Arrudos es la más atractiva de todo el Parque de Redes. Emprenderás una ruta a través del sendero que atraviesa hermosos hayedos y majadas pastoriles y que nos acerca hasta una de las mayores maravillas de esta zona: el Lago Ubales, el único accesible de Redes. Este lago glaciar está situado al pie del pico del Cascayón (con altitud de 1954 metros), y se encuentra cerca de otros tres lagos igualmente impresionantes: el Lago Ausente, el Lago Isboa y la Laguna Negra. 

Esta ruta senderista es muy versátil y presenta distintas opciones de recorrido dentro del sendero PR-AS-61. Por un lado, encontrarás la versión más “light”, que es una excursión de dificultad fácil de ida y vuelta: desde Caleao hasta La Fontana, y que tiene una distancia de 22 kilómetros en total. Esta opción presenta un desnivel de 400 metros. 

Por otro lado y si eres de los que le gusta caminar, puedes optar por seguir el recorrido desde La Fontana hasta llegar al Lago Ubales y la aldea de la Infiesta, donde podrás alojarte y pasar la noche si es oportuno. Esta última opción presenta una dificultad mayor: el recorrido es más largo y no es apta para niños de corta edad. Además, esta ruta supera los 1.000 metros de desnivel.

Eso sí, en ambos casos la exigencia y peligrosidad aumenta con el mal tiempo, por lo que recomiendo que la realices durante la primavera, otoño o verano, ya que el invierno en la zona montañosa de Asturias puede ser peligroso a veces desde el punto de vista de un senderista. 

Cabe resaltar que esta es una de las rutas clásicas del senderismo en Asturias, motivo por el cual se encuentra muy bien señalizada y generalmente concurrida. Además, transcurre a lo largo de un camino muy bien definido y sin pasos complejos, aunque sí que es verdad que hay un cierto desnivel en un considerable número de escalones. Eso sí, es una ruta que te recomiendo mucho hacer si estás pasando unos días en Asturias, ya que el maravilloso paisaje y la impactante naturaleza en la que se enmarca esa ruta no tiene desperdicio alguno.

¿Dónde empieza la ruta del Desfiladero de los Arrudos?

Como he explicado, hay dos caminos posibles a hacer durante la ruta del Desfiladero de los Arrudos, así que primero explicaré la ruta corta y, para los aventureros, seguiré con las indicaciones para completar la ruta “versión extendida”. Eso sí, antes de todo, para empezar la excursión primero hay que llegar al bonito pueblo de Caleao, desde donde empieza de manera explícita la ruta. 

A Caleo se accede tomando la carretera AS-17 en dirección a Pola de Laviana. Tras pasar Rioseco, al final del embalse de Tanes, se toma el desvío a la derecha que indica Coballes y a pocos metros nos desviamos a la izquierda para ir en dirección a Caleao. A la entrada del pueblo, existe un ramal a la izquierda por el cual (aunque la señalización puede dar lugar a un equívoco) se accede a un aparcamiento, a la ermita de San Antonio y a un área recreativa. 

Junto a esta ermita encontrarás un cartel a modo de indicación: “Senda de los Arrudos”, que nos señaliza, pues, el inicio de la ruta a pie. Un dato que encuentro curioso e interesante a la vez es que el nombre que recibe esta ruta proviene de las varas de acebo con estacas que se utilizaban antiguamente para atravesar el desfiladero, cuando no existía el camino actual. Estas estacas medían dos metros y medio de altura y se colocaban cruzadas entre sí a modo de peldaños para facilitar la subida. Ahora sí, empezamos la ruta.

La primera parte de la excursión es por buena pista y toda ella tiene un excelente camino hasta el final, siempre a la vera del río, llamado localmente Ríu los Arrudos. Pronto descubrirás la explosión de colores que suscitan los hayedos y el típico bosque de ribera y de media montaña. Alrededor de la orilla del río destacan abedules, avellanos, hayas, castaños, y algún que otro roble, así como abundantes fresnos. Mientras vayas avanzando, pasarás por el lado de unas viviendas de piedras y dejarás atrás la mole de Peña Roscas. 

Tras cruzar varias veces el arroyo y una vez dejadas atrás las cabañas de Agualmayu, llegarás a un puente de madera conocido con el nombre de Puente de Fuminosa. A partir de aquí el arroyo forma pequeñas cascadas. No muy lejos de allí y justo cuando la pista se transforma en un camino, llegarás a la cabaña de Prendeoriu. Desde aquí, a lo lejos, se divisa el impresionante desfiladero, al cual nos vamos acercando poco a poco. Y, a escasa distancia del Prendeoriu, alcanzarás el puente colgante de La Calabaza, donde se inicia la ascensión (se suele tardar una hora en subir, aproximadamente). 

En este punto comienza el desfiladero de los Arrudos propiamente dicho. El camino aparece, en ocasiones, tallado en la roca. Esto se debe a la necesidad de superar la angostura y el desnivel del desfiladero, que llevó a escarbar varios escalones en la misma roca. De hecho, hay quien cree que antes fue una calzada romana. Para mí, este fue uno de los tramos de la ruta más impresionantes, ya que mientras asciendes puedes contemplar la espectacularidad de la garganta, totalmente encajada entre montañas. 

Tras superar la fuerte pendiente, alcanzarás por fin El Collaín, una pequeña planicie desde donde se divisa gran parte del valle de Roxecu. Desde El Collaín, siguiendo el camino principal y dejando el río a la izquierda, llegas tras breve trecho a La Fontona, punto de arranque de las tuberías que conducen el agua destinada al abastecimiento de los habitantes de Gijón. Este es un punto perfecto para descansar un poco frente la orilla del río y reponer fuerzas. Y es, también, el punto de retorno hacia Caleao para aquellos que estéis ya cansados de caminar o que vayáis con niños pequeños. 

El descenso por Los Arrudos exige cierta precaución si las losas están húmedas. También es aconsejable pararse a menudo para contemplar la naturaleza, pues esta contemplación es lo más gratificante de la excursión. 

Personalmente, una vez llegué a este punto decidí continuar: ¡las ganas de seguir viendo este maravilloso paisaje pudieron conmigo! Y, sinceramente, valió la pena. Pero vamos por partes.

Justo antes de llegar a la Fontona, hay un camino que asciende y atraviesa el frondoso hayedo de Los Arrebellaos hasta alcanzar la Majada de Roxecu, una hermosa planicie donde podrás ver antiguas cabañas derruidas. Al atravesar el río, se inicia una ascensión de algo más de kilómetro y medio que lleva, en primer lugar, a la majada de Llede, y, en segundo lugar, a la majada de los Moyones. Llegados a este punto, aconsejo hacer una pequeña pausa para descansar y tomar agua en una fuente cercana. Cabe resaltar que esta majada está completamente rodeada de montañas en una especie de circo, con preciosas vistas panorámicas.

Desde aquí, el camino continúa ascendiendo entre praderas de alta montaña y, después de atravesar una pequeña zona poblada de escobas, llegarás a la Collada de Ubales. Este es el punto más alto de la ruta, gracias a sus 1711 metros de altitud. Desde aquí arriba podrás disfrutar de unas magníficas vistas de la vega de Brañagallones, el Cantu l’Oso, el Tiatordos e incluso del Macizo Occidental de los Picos de Europa. En la misma collada debes tomar un desvío a la derecha que, sin perder altura, llega en pocos minutos al Lago Ubales o, como lo dirían los locales, Lagu Ubales.

Es un lugar simplemente precioso y, en palabras del escritor y montañista José Ramón Lueje, un “gran vaso de las tierras casinas”. Esta pequeña laguna de montaña en la que habitan varias especies de anfibios, entre ellos el tritón alpino y el ibérico es frecuentada al atardecer por los rebecos. Y no es extraño ver también huellas de lobos. Un poco más abajo, en el bosque, abundan los cérvidos y los jabalíes. Debes saber también que si vas hasta el lago en pleno verano puede que no tenga mucha agua. Eso sí, en primavera o en época de lluvias, el nivel del agua llega a unos 4 metros de profundidad a lo largo de los 200 metros de largo que este lago ocupa. 

Tras regresar al Colláu Ubales, empieza el descenso a la majada de la Carbaza, donde la ruta entronca con el antiguo Camín de Castilla, que antaño recorrieron con asiduidad los arrieros casinos. El itinerario prosigue a la izquierda por este mismo camino, alcanzándose cómodamente la collada de La Canalina y, tras ésta, la de Pandu Vallegu, lugar donde no te resultará extraño disfrutar del espectáculo de alguno de los rebaños de rebecos que frecuentan la zona.

Ahora sí, podríamos decir que has llegado al final de la ruta. El siguiente paso es descender hacia las cabañas de Pasaoriu por el amplio y bonito camino que conduce a la aldea -anteriormente mencionada- de La Infiesta, donde acaba definitivamente la ruta por el Desfiladero de los Arrudos. 

En este punto, si estás muy cansado, es oportuno coger un taxi que te recoja y te deje al punto de inicio, al parking de Caleo donde habrás dejado el coche para iniciar la ruta a pie. En caso de que escojas esta opción, te dejo el número de taxis de Caso al que deberías llamar: 654 387 760. 

Sea como sea, y vayas con quien vayas, la ruta del Desfiladero de los Arrudos es una experiencia preciosa y en la que el contacto con la naturaleza, el agua y las montañas te llenarán por dentro. Y, como siempre digo, recuerda tratar el entorno natural con respeto e integridad. Hay que cuidar de la naturaleza, y aún más de los parques naturales, espacios altamente protegidos debido a su elevado nivel de biodiversidad, con flora y fauna muy diversa y difícilmente localizable en otros sitios. Entre todos y todas podemos disfrutar y cuidar a la vez de las maravillas que nos regala el paisaje de nuestras tierras sin pedir nada a cambio, solo un poco de uso de la razón.

¿Dónde comer en el desfiladero de los arrudos?

A lo largo de la ruta por el Desfiladero de los Arrudos hay múltiples sitios donde hacer un descanso y aprovechar para reponer fuerzas, comer y beber algo de agua. De hecho, la primera parte, con menos desnivel y a nivel de la orilla del río, es ideal para esta actividad más relajada. Sin embargo, también es buena idea esperar a hacer el ascenso por las escaleras de piedra excavadas en la montaña para comer rodeado de unas vistas con perspectiva increíbles. 

A modo de ejemplo, cuando yo fui, vi varia gente que aprovechaba para comer junto a la orilla del río, al llegar a la Fontona, una vez superada la fuerte pendiente que nos llevaba al Collaín. Además de ser un punto perfecto para comer algo y reponer fuerzas, es justamente el lugar donde termina el recorrido “light” y podrás aprovechar para decidir si quieres seguir la excursión hacia el Lago Ubales o volver hacia atrás e ir descendiendo hacia el inicio de la ruta. 

Además, pero, hay otras opciones más elaboradas -gastronómicamente hablando- que os aconsejo que probéis. Y es que la alta cualidad de la gastronomía asturiana es conocida por todos y todas. ¡Aprovecha, pues, la ocasión!

El restaurante de La Encruceyada, muy cerca de Caleao en coche, es famoso por sus manos de cerdo, no tienen desperdicio, ¡te lo aseguro! Y, ya antes de marchar y dar por finalizado el día, no puedes olvidarte de pasar por la localidad de Tanes. Este pueblecillo hace los mejores quesos de toda la província. Vés a las instalaciones de “Quesos artesanos La Corte” y compra un queso casín (el precio de cuando yo fui era de 8 € los 250 gramos). Y es que la cualidad lo vale: este es uno de los quesos más antiguos de toda España y de hecho lo podrás encontrar en varios pueblos de la zona del Parque Natural de Redes. Este queso se elabora con leche cruda de vaca de forma artesanal: amasando la cuajada con una especie de rodillos. Por esta técnica, este peculiar queso tiene un sabor fuerte y algo picante. 

¿Cuantos kilometros tiene la ruta del Desfiladero de los Arrudos?

La ruta del Desfiladero de los Arrudos tiene, en su versión corta (es decir, del pueblo de Caleao a la Fontona) 11 kilómetros de distancia horizontal, contando la ida y la vuelta. Si nos fijamos en el recorrido largo, es decir, del pueblo de Caleao, pasando por el Lago Ubales y acabando en la aldea de la Infiesta, tiene una distancia total de 22 kilómetros. 

La ruta reducida, suele hacerse en unas 4 horas y media. Tiene un desnivel de 360 metros y una dificultad baja. Perfecta para hacer si vas con niños. Por lo que respecta a la ruta más extensa, tiene una duración media de entre 7 horas y media y 8 horas, un desnivel de 1000 metros y una dificultad media-alta. 

Si necesitas más información sobre la ruta del Desfiladero de los Arrudos o sobre el Parque Natural de Redes, contacta con el Centro de Recepción e Interpretación del parque, que está ubicado en la localidad de Campo del Caso. Su teléfono es el 985 608 022, y la página web donde encontrarás toda la información que quieras y más, es esta: www.parquenaturalderedes.es.

Finalmente, quería recordar que debes tener mucha precaución en las zonas más altas de la montaña y a lo largo de la ruta en caso de que aparezca niebla. También, como he explicado antes, debes tener en cuenta que, si no eres muy experto en senderismo, mejor no hagáis esta ruta en pleno invierno, ya que el mal tiempo puede jugar en tu contra en un terreno con tanto desnivel. Lo más aconsejable es acudir a principios de otoño, cuando los árboles se ponen de gala e iluminan el entorno con multitud de colores, o en primavera, cuando la naturaleza muestra la mejor versión de sí misma: agua abundante, frondosidad y una temperatura perfecta. Solo te falta coger un buen equipaje y calzado de montaña, ¡y lanzarse a explorar!

Espero que os haya gustado el post del desfiladero de los Arrudos, si estas por la zona y quieres ver otro desfiladero puedes ir al Desfiladero de la hermida y también os dejo los pueblos más bonitos de Asturias

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