La Roca Foradada de Montserrat
Montserrat es la montaña por excelencia de Cataluña: su templo, su idiosincrasia, su centro vital. De hecho, desde hace numerosos años se considera la montaña más significativa e importante para el territorio catalán, y es que, antaño, los franceses conocían Cataluña bajo el nombre de “Montserrat”. Este macizo rocoso está situado a poca distancia de la capital condal, Barcelona, a tan solo 60 kilómetros, quedando en medio de las comarcas interiores de la Anoia, el Baix Llobregat y el Bages.
Actualmente, este lugar sigue teniendo mucha fama, y cada año miles de personas acuden a visitar Montserrat. Los motivos de las visitas turísticas son diversas, pero la gran mayoría vienen por motivos religiosos -en la montaña encontramos el santuario y el monasterio benedictino dedicados a la Virgen de Montserrat, conocida como “la Moreneta”, la patrona de Cataluña- así como el el monasterio de monjas benedictinas San Benito de Montserrat. Otra gran parte de la gente que viene hasta aquí es para hacer deporte o bien descubrir las preciosas vistas que nos brinda la montaña más representativa y característica de Cataluña. De alguna forma, pues, es parte de la historia de Cataluña, y si estás pasando unos días en esta comunidad, sin ningún tipo de duda Montserrat es visita obligatoria.
La montaña de Montserrat es un sitio muy especial que no deja a nadie indiferente -de hecho no conozco a nadie que la haya visitado que no quiera volver-, y es perfecta para realizar rutas de senderismo no muy lejos de Barcelona. Entre las distintas posibilidades que nos brinda el macizo, destaca la excursión a la famosa Roca Foradada de Montserrat, un agujero con forma triangular de 10 metros de altura y unos 6 metro de ancho, visible desde muchos kilómetros de distancias, y desde el cual se tienen unas vistas impresionantes de los alrededores.
De hecho, la leyenda cuenta que fue el Diablo quién formó esta curiosa forma en triángulo de la roca cuando, perseguido por la Virgen de Montserrat, intentó abrir camino para huir hacia el infierno. A su lado encontramos “la cadireta”, el nombre bajo el cual se conoce la imponente roca con forma de silla, cabeza de gato o dinosaurio -depende de como lo mires- que acompaña a la Roca Foradada. Así pues, leyendas a parte, este lugar tan auténtico y impactante de la montaña de Montserrat se ha convertido hoy en día en una ruta excursionista muy recomendable para hacer en familia -si tienes niños pequeños o no sois muy expertos no te preocupes, es una ruta de dificultad media-fácil-, con amigos o con tu pareja. Bueno, el tramo final quizás es un pelín más complicado, pero al fin y al cabo, asequible. ¡Te cuento todos los detalles de la ruta, los trucos y las recomendaciones extras de los lugares que puedes visitar por la zona del macizo de Montserrat en este artículo!
¿Cómo llegar a la Roca Foradada?
Antes de empezar a explicar la ruta de la Roca Forcada como tal, unas breves indicaciones de la situación general y sus principales características. El trayecto tiene una duración total (es decir, ida y vuelta incluidas) de 3,6 kilómetros, con lo que aproximadamente y dependiendo del ritmo vital de cada uno, se tardan unas 2 horas en hacer el recorrido. Además, el desnivel acumulado es de 300 metros y se dice que tiene una dificultad media, más que nada por la última parte de la ruta, en la que hay que escalar para llegar a la Foradada.
Por último antes de ponernos manos a la obra, como recomendación para encarar esta aventura senderista con buenas garantías, recuerda llevar ropa y calzado de montaña y que sujete bien el pie, ya que, como he comentado, el la última parte de la ruta deberás escalar y es muy recomendable que el calzado agarre bien el pie. Finalmente, recuerda traer agua y comida para ir reponiendo fuerzas y energías a lo largo del trayecto, así como no es mala idea que cogas crema solar o una gorra para protegerte del sol en los meses más calurosos del verano, o una chaqueta para protegerte de eventuales vientos, sobretodo en los meses de otoño.
Si vienes desde Barcelona, para llegar a Montserrat tienes distintas opciones. Por un lado, puedes optar por ir en coche, ya que este macizo rocoso se encuentra a poco más de 60 kilómetros de la capital condal y en unos 45 minutos puedes estar allí. Deberías tomar o la autovía A-2 o bien las carreteras C-16 y C-58. Por otro lado, si prefieres ir en transporte público, la mejor opción es ir en Ferrocarrils de la Generalitat, que se cogen en plaza España y hacen un recorrido por diversos municipios de la comarca del Baix Llobregat hasta llegar a la parada del Monistrol de Montserrat. Una vez allí siempre puedes optar por coger el famoso teleférico, que te sube hasta el monasterio de Montserrat en pocos minutos y te brinda unas vistas y una experiencia impresionante que fascinará a todos, especialmente a los más pequeños de la casa.
Pero, volviendo a centrarnos en nuestra ruta por la Roca Foradada, si has llegado en coche, es una buena opción porque encontrarás un aparcamiento habilitado para dejar allí tu vehículo y empezar desde allí la ruta a pie. El lugar se llama Can Maçana y se puede llegar fácilmente con el GPS. Debes saber que el área de ocio de Can Maçana tiene una capacidad total de unos 100 vehículos, pero que durante los fines de semana, puentes y festivos, este aparcamiento es de pago y cuesta 4€ para todo el día.
Desde el parking de Can Maçana, la ruta a pie empieza subiendo en dirección al Refugi de Vicenç Barbé, siguiendo el GR-162, que es una pista bastante ancha. Al poco tiempo de subir, aproximadamente a los 5 o 10 minutos según tu ritmo, verás el bonito mirador de Can Maçana desde el que se pueden ver diferentes puntos de Cataluña -por ejemplo el imponente Puigmal y el mítico Pedraforca- y admirar un paisaje y un entorno natural único y fascinante. Desde este punto ya podrás ver por primera vez a lo lejos la silueta de nuestro destino final: la Roca Foradada, junto con la formación rocosa “La Cadireta”, (“La sillita” en castellano) que he mencionado antes y que adquiere esas formas tan curiosas parecidas a un gato, un dinosaurio o, tal y como indica su nombre popular, una silla.
Ruta por la Roca Foradada de Montserrat
Ahora ya entramos en terreno serio, y se puede decir que nos adentramos en la ruta de la Roca Foradada como tal. Hay que retomar la marcha por el mismo camino por el que ibas durante unos 10 o 15 minutos más. Esta parte no tiene pérdida alguna y no tiene demasiado pendiente, por lo que es una parte agradable que se recorre sin problema. Al final llegarás a una bifurcación que indica seguir hacia la Roca Foradada. Si queremos ir aquí lo más habitual es seguir recto desde donde venimos, pero también hay la opción de desviarse en dirección Sant Pau Vell -hacia la derecha- para encontrar a 5 minutos las magnéticas ruinas de la Iglesia de Sant Pau Vell de la Guàrdia.
Esta iglesia data del año 1084 y se cree que pudo haber sido la capilla del castillo que antaño se encontraba en esta zona de Cataluña. Las excavaciones que se llevaron a cabo para recuperar los restos de esta pieza arquitectónica tuvieron lugar en el año 2004. Si te interesa hacerle un vistazo, también puedes optar por ir a visitar esta iglesia durante el trayecto de vuelta si a la ida tienes interés en llegar cuanto antes a la Roca Foradada.
Desde aquí se tienen unas impresionantes vistas a las llamadas “Agulles de Montserrat”, unas formaciones rocosas puntiagudas -con forma de aguja- que impactan a todos los visitantes ya que nacen de la nada, como puestas allí por arte de magia, y se alzan imponentes hacia el cielo. Si eres amante de la escalada, puedes informarte más y escalar algunas de ellas en las que se permite esta práctica deportiva.
Después de visitar la iglesia, es momento de volver al camino principal y seguir recto hasta llegar al Collet de Guirló, en un tramo que tardarás aproximadamente unos 20 minutos en hacer. Aquí dejarás la señales del refugio y debes seguir por el camino GR -indicado con señales rojas y blancas- en dirección al Monasterio de Montserrat. Aquí tendrás que girar.
A partir de este momento se puede decir que empieza la parte más “compleja” del trayecto. El tramo que se avecina está lleno de rocas y puede suponer cierta dificultad para los niños más pequeños de la casa -no es recomendable ir con niños menores de 10 años- o para gente mayor. La clave es ir subiendo en forma de zig-zag, siguiendo el sendero marcado, y ayudándote de las manos para trepar un poco en ciertas partes del trayecto. Eso sí, no te preocupes, porque si vas despacio, con precaución, y llevas buen calzado, superarás este tramo sin ninguna dificultad. De hecho, esta parte es peor cuando vuelvas y hagas el camino inverso, porque será de bajada y el terreno resbala más. Para hacer este tramo de la ruta hasta llegar a la Roca Foradada tardarás aproximadamente unos 15 minutos si te lo tomas con calma.
Y, ahora sí que sí, ¡ya verás al fin la Roca Foradada! Cuando “te metas” dentro de su agujero triangular, te sentirás muy pequeño y tendrás una sensación muy curiosa y fascinante a la vez. Las vistas que nos ofrece este lugar son simplemente impresionantes, y el aire fresco que corre allí arriba compensará todo el sudor y todo el cansancio que puedas traer contigo. Es realmente sorprendente como la erosión del agua y del viento a lo largo de los años han conseguido moldear esta roca hasta darle esta forma tan particular de triángulo.
Si estás solo o no hay demasiada gente, aprovecha para sentarte en una piedra y observa el espectacular paisaje mientras recuperas las fuerzas tomando un poco de agua, desayunando o comiendo de tupper. Además, es el momento perfecto para sacar unas buenísimas fotos, tanto del paisaje como de la roca en sí.
Una vez finalizada esta ruta, solo queda volver al punto de inicio, es decir, al aparcamiento con el coche. Para ello, tan solo hace falta que deshagas el camino que has hecho para subir, pero esta vez de bajada. Cuando llegues de nuevo al sendero principal, te quedarán unos 30 o 40 minutos andando aproximadamente hasta el aparcamiento, y podrás decir que has finalizado tu excursión a la Roca Foradada de Montserrat. Esta experiencia vale mucho la pena, la verdad es que es una ruta muy agradable y con buenas vistas, y, encima, a poca distancia de Barcelona.
Como se trata de una ruta cortita, es muy buena idea que aproveches que estás en Montserrat para visitar el monasterio, el cual se encuentra a 20 minutos en coche desde Can Maçana -donde habrás aparcado- y tiene mucha historia y un magnetismo increíble. ¡No te lo puedes perder!
Monasterio de Montserrat
El Monasterio de Montserrat es una abadía benedictina situada en la província de Barcelona, en la misma montaña de Montserrat, y se ubica a 720 metros de altitud respecto al nivel del mar. Administrativamente pertenece al municipio de Monistrol de Montserrat, el pueblo que hay a los pies de esta montaña, pero es cierto que algunos de sus terrenos colindantes entran dentro del término municipal de Collbató. Este monasterio es de gran importancia para Cataluña, y es que ha convertido en un punto clave de peregrinaje tanto para creyentes como para turistas no creyentes que simplemente quieren admirar la belleza del lugar y descubrir parte de la historia y la importancia de este lugar tan espiritual para el territorio catalán.
Entre las distintas asociaciones y convenciones que alberga este monasterio, destaca la “escolanía”, un coro de niños cantores que es uno de los más antiguos de toda Europa. De hecho, hay documentos que certifican su existencia como institución religiosa y musical desde el siglo XIV. Así, la Escolanía de Montserrat actúa como escuela para estos niños, que durante todo el curso escolar viven aquí y los días de misa cantan delante del público que los viene a escuchar, con gran afluencia los domingos y festivos.
El santuario de Montserrat, junto con los santuarios de Torreciudad (Huesca), El Pilar (Zaragoza), Meritxell (Andorra), y Lourdes (Pirineos Franceses), conforman la Ruta mariana, un itinerario guiado por la espiritualidad y devoción mariana, poseedor de una gran riqueza patrimonial, gastronómica y natural.
Este monasterio pertenece a la Orden de San Benito y data del siglo XI. Tiene una mezcla de estilos, combinando el románico, el gótico, arquitectura propia del Renacimiento y arquitectura ecléctica.
¿Cómo llegar al Monasterio de Montserrat?
Para llegar hasta el Monasterio de Montserrat hay varias opciones. En primer lugar y como opción más cómoda y sencilla, puedes dejar el coche en el aparcamiento habilitado. El problema es que, dependiendo del día o la hora en que vengas, puede ser que el parking ya esté lleno. Si te interesa la opción, el precio es de 6,50 euros si te pasa de los 30 minutos de visita -que es lo más probable porque sino no tendrás tiempo a disfrutar ni ver nada-. En segundo lugar, puedes dejar el coche en el parking o por el municipio de Monistrol de Montserrat, que está justo a los pies de la imponente montaña, y desde allí mismo coger un Cremallera que te sube hasta arriba del todo. La verdad es que, personalmente, te recomiendo esta segunda opción, ya que es muy divertido subir en cremallera, es una experiencia única que les encanta a los niños, y encima tienes la tranquilidad y seguridad de saber que encontraras aparcamiento seguro para dejar tu vehículo.
Sea como sea, una vez hayas llegado, seguro que quedas fascinado por las vistas y la amplitud y paz que transmite el lugar. Después de pasear por la gran plaza que preside la zona, la plaza de Santa María, acércate a la puerta de la Basílica de Montserrat para observar la famosa Moreneta: la virgen de Montserrat y patrona de Cataluña, lo que supone todo un símbolo para los catalanes. La Moreneta es una figura tallada en madera de la Virgen María que lleva en brazos al niño Jesús. Pero la particularidad y fama de esta figura reside en el hecho de que su piel es completamente negra. Por esta razón ha adquirido tanta popularidad, y los visitantes suelen hacer cola para pedirle milagros a la estatua.
Si entras en la Basílica, te sorprenderá su grandeza y la belleza del lugar. Te diría que, si vas, aproveches para intentar cuadrar tu visita con una actuación del coro de la Escolanía de Montserrat, ya que quedarás maravillado de la misticidad y paz que transmite este coro infantil. En definitiva, hacer una visita al monasterio de Montserrat -después puedes aprovechar para ir a tomar algo a los bares que hay por alrededor- es una experiencia única e irremplazable por cualquier otra cosa. La misticidad, tranquilidad y paz que transmite este lugar no se puede describir con palabras, debes ir al lugar y experimentarlo tú mismo. ¡No te arrepentirás!
El Mirador de la Creu de Sant Miquel
Si después de todas estas visitas aun te quedan fuerzas y tienes ganas de más, te recomiendo aprovechar para visitar la Creu de Sant Miquel. Se trata de una ruta muy sencilla y corta, que apenas te robará 25 minutos andando, y te obsequiara con unas vistas únicas de la montaña y el monasterio, así como los alrededores de Montserrat. Verás el camino indicado hacia la cruz que sale de la plaza Abat Oliva, y el recorrido es entretenido porque te irás encontrando con distintas esculturas. Las dos esculturas más destacadas son las que representan al músico Pau Casals y a San Francisco de Asís. La primera es obra del escultor Joan Rebull (1899-1981), y fue encargada en conmemoración del centenario del nacimiento de Pau Casals en el año 1976.
Como he comentado, es un camino muy sencillo, ya que está asfaltado casi en su totalidad, y es de fácil acceso. Recuerda que, a pocos metros de llegar a la esperada Cruz, a mano izquierda verás un pequeño descampado, lugar ideal para descansar un poquito y aprovechar para contemplar las fabulosas vistas del lugar. Finalmente, llegarás a la Cruz de Sant Miquel.
El camino de Sant Miquel era el itinerario de acceso a Montserrat más importante en la época medieval. Tenía su punto de partida en el municipio de Collbató, situado al pie de la montaña, y después del largo camino, cuando los peregrinos llegaban a la Cruz de Sant Miquel podían ver por primera vez el monasterio y el santuario de Montserrat.
¿Dónde comer en la Roca Foradada de Montserrat?
Si eres de los que prefiere comer con cubiertos y mesa, Montserrat también ofrece opciones para ti. Te traigo algunos de los mejores restaurantes de la zona para que puedas relajarte y reponer fuerzas después de un día de excursiones y experiencias nuevas.
Restaurant Abat Cisneros
El Restaurante-Hostal Abat Cisneros está situado en el mismo hotel que lleva este nombre y que se encuentra en el mismo Monestir de Montserrat. Por lo tanto, el lugar tiene magia por sí solo: el comedor data del siglo XVI y antaño se utilizaba para alojar las caballerizas. Cuenta con una extraordinaria vuelta de piedra como techo y las paredes son de roca viva. El conjunto ofrece un ambiente tranquilo y familiar que, combinado con la gran calidad de su comida y un menú que hace honor a la comida tradicional catalana, te va a encantar.
Bufet de Montserrat
En el mismo Monestir también encontrarás el restaurante Bufet de Montserrat, que ofrece la posibilidad de hacer una comida más ligera y rápida, y a un precio más asequible. Lo mejor de este restaurante es la gran variedad de comida que ofrece, de donde destacan los platos tradicionales de la comida mediterránea, y las impresionantes vistas de la montaña de Montserrat que podrás admirar desde los grandes ventanales del comedor.
Restaurant Ca la Rosa
Finalmente, si nos vamos de la zona del monasterio como tal, y volvemos al pueblo de Monistrol de Montserrat, donde puede que tengas aparcado el coche y desde donde se coge el cremallera que te sube arriba, encontrarás el restaurante Ca la Rosa: ¡para chuparse los dedos! Este es un lugar de trato familiar y de comida tradicional catalana. Su menú se basa en la comida tradicional catalana, y la variedad de su comida y el buen trato de su personal te harán sentirte como en casa.
Espero que os haya gustado esta estupenda excursión a la roca foradada de Montserrat, podéis encontrar más rutas de senderismo. Dejarme vuestros comentarios!
Yo intenté llegar hasta la roca foradada, andando, desde el monasterio, con el gps y si te lleva, pero abajo y cuando llegas ves ese agujero triangular arriba del todo pero desde allí no había manera de subir, a no ser que sea escalando. Mi pregunta es, hay algúna ruta que te lleve hasta la roca, pero arriba, si vas andando, desde el monasterio, o desde monistrol??
Me ha encantado el post de la roca foradada, la verdad que había ido a montserrat pero no conocía este punto voy a ir este fin de semana!
Gracias por tu comentario! Espero que hayas disfrutado!