Pantano de Foix

El pantano o embalse de Foix es una infraestructura hidroeléctrica que ha sido construida sobre el río del que surge su nombre, el río Foix.

Este tiene una longitud total de 40 kilómetros, y es que sus aguas nacen en la sierra de la Llacuna, que se encuentra en la comarca de la Anoia. Por lo que respecta al pantano, está situado en el municipio del Castellet i la Gornal, que se encuentra limitando con la comarca del Garraf y la comarca del Alt Penedès. Así pues, debido a su proximidad con Barcelona, acudir al pantano de Foix resulta una muy buena idea para pasar un día divertido y original en familia, con la pareja o con amigos. Si decides pasar un día en este bonito lugar del paisaje catalán, no te arrepentirás, ya que es la mejor opción para estar en contacto con la naturaleza y no muy lejos de la capital catalana. 

Concretamente, el pantano de Foix ocupa un total de 66 hectáreas, a las cuales hay que añadirles el espacio fluvial del embalse, que suman un total de 79 hectáreas. La historia de este impactante lugar es que el embalse fue construido a principios del siglo XX con la principal finalidad de regar los campos dedicados a la labor agrícola, al ser una de las pocas zonas húmedas existentes.

De hecho, la idea original para esta construcción era empezar las obras en el año 1903, pero no fue hasta años más tarde que se empezaron a mover hilos. Finalmente, se acabó de construir en 1936. Eso sí, actualmente las aguas del embalse no son aptas para el consumo humano, dado que proceden de la depuradora de Vilafranca del Penedés. 

¿Cómo llegar al pantano de Foix?

A menos de una hora en coche de Barcelona, ir a pasar un día entero al pantano de Foix y sus alrededores es una opción ideal para disfrutar en familia. Si vas en coche, la mejor opción es coger la carretera C-32 en dirección a Vilanova y la Geltrú, e ir siguiendo por el camino los pueblos de la costa dorada catalana. Una vez llegues a Vilanova y la Geltrú, toma la salida C-31 hacia l’Arboç. Pronto llegarás a tu destino. 

Por otro lado, otra buena opción es coger el tren R-S2 hacia Vilanova i la Geltrú, y luego desde allí coger un bus en dirección al pantano de Foix. En menos de una hora y media estarás en tu destino, y además habrás podido disfrutar del maravilloso paisaje de la costa catalana. 

¿Qué ver en el pantano de Foix?

Una vez estés en el embalse de Foix, te recomiendo aprovechar para ver los alrededores de la zona. 

Castillo de Castellet

Personalmente, considero imprescindible que des una vuelta por el pueblo de Castellet i la Gornal, el cual se encuentra en medio del término municipal del Pantano de Foix. Este es un precioso pueblo medieval que cuenta con un encanto muy especial. Puedes aprovechar para visitar la iglesia que hay allí, pero la verdad es que lo más impresionante y recomendable es el castillo de Castellet. Perteneciente a los condes de Barcelona, la primera referencia que se tiene de este edificio data del año 977, cuando aún recibía el nombre de Sant Esteve. 

A medida que pasaban los siglos, el castillo fue cambiando de manos contínuamente, perdiendo cada vez más importancia política y militar, especialmente a partir del siglo XVI. Finalmente, en 1999, este lugar lleno de historia fue adquirido por la empresa Acesa, que lo rehabilitó y construyó nuevas dependencias para alojar la sede de la Fundación Abertis. Asimismo, hoy en día este castillo se ha convertido en una fortaleza dedicada a la defensa del medio ambiente. De hecho, alberga la sede del Centro Unesco-Fundación Abertis para las Reservas de la Biosfera, cuyo objetivo es promover y desarrollar actividades de estudio, protección y conservación de la naturaleza. 

Además, si llegas a primera hora de la mañana a Castellet, es un buen momento para participar en una de las visitas guiadas que se organizan por el castillo. Debes saber que las visitas guiadas empiezan, durante los fines de semana, cada hora en punto: de 10 de la mañana a 14 de la tarde, con lo que tienes un total de 5 visitas guiadas organizadas por jornada. ¡No te quedes sin acudir!

En esta línea, si te interesa la historia medieval, te recomiendo especialmente que aproveches para visitar este pueblo durante algún fin de semana de junio, que es cuando se celebra la fira medieval: las calles y la gente se visten para la ocasión, se organiza una muestra de oficios antiguos y se llevan a cabo espectáculos y un cercavila medieval. La diversión está asegurada, así que, si tienes niños pequeños, no dudes en darles la oportunidad de vivir esta original experiencia. 

Ruta senderista

Más allá del componente monumental, desde el pueblo en cuestión salen diversas rutas señalizadas hacia el parque de Foix, que permiten descubrir los diversos ecosistemas que envuelven el pantano. La riqueza de este lugar es increíble: más de 210 especies entre las que destacan ánades reales, carpas, anguilas, garzas, pollas de agua y el galápago leproso, una especie autóctona y que tiene prohibida su recolección. 

Así que, si te gusta el senderismo y la montaña en general, esta también es una muy buena opción. Concretamente, la ruta que se suele tomar -y que yo personalmente también hice- tiene una longitud aproximada de 15 kilómetros, con un desnivel de 400 metros, y una altura de 332 metros. Es un camino muy agradable y asequible, apto para toda la familia y tanto para expertos en senderismo como novatos. 

La ruta en cuestión parte del sendero que sale del lateral del castillo de Castellet, y, tras atravesar una arboleda y viñedos -muy típicos del paisaje de esta zona-, dirígete hacia la Serra de Mala. A lo largo de la subida, y sobretodo si es agosto o algún mes de pleno verano, es recomendable ir haciendo paradas técnicas para reponer fuerzas, beber agua o incluso comer algo para llenar el depósito de energía. 

Una vez llegues arriba del todo de la Sierra, sigue por un sendero de roca con formaciones y agujeros donde podrás observar el paso de los años y la fuerza de la lluvia. Una vez allí, llegarás en seguida a las masías, las cuales están en ruinas, pero son muy bonitas de ver igualmente: son conocidas bajo los nombres de Cal Balaguer, Cal Cremat y Cal Cassanyes. 

Ahora ya debes empezar la bajada. Para ello, desvíate hacia el sendero PR-143, que te lleva dirección a la presa. A los pocos metros de recorrido pasarás por debajo de un acueducto, y es allí donde debes coger el camino que va paralelo a la carretera, y acto seguido cruzar un puente. Allí, justo delante tuyo, tendrás el pantanto de Foix. Una vez aquí, lo mejor es bordear el embalse y observar la belleza del agua, la naturaleza, y la flora y fauna autóctona. El lugar, su alrededor, y la calma y tranquilidad que se respira son inigualables. El recorrido vale la pena. 

Y, efectivamente, este es el momento perfecto para descansar definitivamente y reponer la energía perdida a lo largo del día. Puedes aprovechar para comer al lado del lago con c¡bocatas o comida que traigas hecha, mientras disfrutas observando las aguas del embalse. 

Si te sobra tiempo o si decides pasar unos días en la zona, no puedes irte sin hacer una visita a algún que otro lugar de la zona del pantano de Foix igualmente maravilloso. Y es que el parque del Foix forma parte de la Xarxa d’Espais Natural protejidos, promovidos y gestionados por la Diputación de Barcelona, debido a su alto interés paisajístico. De hecho, el Plan Especial del Pantano de Foix, aprobado el 28 de julio de 1993, es la figura urbanística que garantiza la preservación de los valores naturales y culturales de la zona. 

Cal Bladet

Por otro lado, vale la pena destacar la existencia de Cal Bladet o Caseriu Bladet, una masia que encontrarás en esta zona y que ha sido declarada Bien Cultural de Interés Local. Situado al lado del río Foix, se trata de un pequeño núcleo formado un conjunto de edificios que se encuentran delimitados por una tanca de protección. De construcción estilística tipo popular, este pequeño oasis de casas es precioso. 

Santa Margarida y els Monjós

También colindante entre la comarca del Penedés y el Garraf, muy cerca del pantano de Foix, encontrarás este pueblo de nombre particular y aspecto espectacular. Lo destacable de este lugar es que recibe también las aguas del río Foix, que forma a lo largo del término municipal diversos meandros y sinuosidades. Además, dentro del municipio, el río Foix recibe por la izquierda las aguas de la riera de la Maçana o de Llitrà, y por la derecha, las de la riera de la Bruixa, que hacen límite con el término municipal de Castellet. 

¿Dónde comer en el pantano de Foix?

Como ya he mencionado antes, una muy buena opción es traerte tu propia comida y aprovechar para hacer un picnic junto al embalse de Foix. Ahora bien, si prefieres sentarte en una mesa y reponer fuerzas a lo grande, la mejor opción que tienes es volver al pueblo de Castellet i la Gornal. 

Encontrarás distintos bares y restaurantes a lo largo del municipio, pero lo cierto es que, cuando fui, probé un lugar que me dejó maravillado, y por lo tanto no lo puedo dejar de recomendar. Se trata del Restaurante El Barretet, situado en la calle Carre Nou, número 17. Aquí encontrarás comida de todo tipo, pero sobretodo tradicional catalana, con productos de primera proximidad y kilómetro 0. Además, la relación calidad-precio es muy acertada. Así que ya sabes, si acabas tu jornada en el pantano de Foix exhausto y necesitas alimentarte con contundencia y cualidad, esta es la mejor opción de todas. ¡A disfrutar!

Espero que os haya gustado la ruta de senderismo por el pantano de Foix, también podéis hacer una ruta que seguro que os gusta mucho en el congost de mu . Dejar vuestros comentarios si habéis visitado el Pantano

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